PROBLEMAS CON EL CENTRIFUGADO

La lavadora no centrifuga.
No centrifuga algunas veces.
No centrifuga, empieza a hacerlo perdiendo fuerza y se para unos minutos.
No centrifuga a la velocidad habitual.
Se queda centrifugando, se debe finalizar manualmente.
Al centrifugar da saltos y hace mucho ruido.
Tambor Gira más rápido de lo normal en lavado y centrifugado.
Inicia al comienzo del lavado el centrifugado, se para coge agua, la expulsa y se para.
El lavado lo hace bien pero el centrifugado lento.
Queda la ropa mojada después de centrifugar.
Lavadora de carga superior realiza todo el ciclo menos el centrifugado.
Sonido fuerte y agudo o molesto al centrifugar, no es constante.
Sonido agudo al lavar y sobre todo al centrifugar.

AVERIAS DEL TAMBOR

No comienza a girar el tambor en vacío sin carga ni centrífuga.
No comienza a girar el tambor con carga.
Motor no gira. Moviendo el tambor con la mano se consigue que empiece a girar.
Huele a quemado o ha salido humo, tambor no gira.
Motor no gira o después de girar unas vueltas se para.
Tambor interno está suelto.
Ruido en el lavado en ambos sentidos de giro, proveniente de los cojinetes.
Ruido que comienza durante el lavado deteniéndose el bombo.

PROBLEMAS ELECTRONICOS O MECANICOS

No inicia el lavado.
Los lavados se alargan en el tiempo más de 2 horas.
En algún punto del programa no avanza y carga agua hasta rebosar.
Programador no gira, el programa no avanza.
Modelo electrónico, el programador gira constantemente funcionamiento aleatorio
La lavadora tarda en empezar a funcionar.
Después de saltar el diferencial no funciona nada, se enciende el piloto.
Lavadora carga superior no empieza a funcionar.
Identificación de los bobinados de un motor
Se sale la correa.
Engancha la ropa y la rompe.
Lavadora comprada en EEUU no funciona en Europa.
Carga frontal problema de cojinetes, síntomas.
Motor lavadora y condensador.
Presostato.
La máquina da calambre al tocarla.

AVERIAS FRECUENTES EN LA BOMBA DEL AGUA

Carga agua constantemente.
Llena el tambor y rebosa.
La máquina tira el agua. Se sale el agua.
No carga agua correctamente.
No carga agua y del tambor sale vaho.
Siempre lava con agua caliente.
Salta el diferencial de la vivienda al lavar con agua caliente.
No termina el ciclo de lavado se queda siempre desaguando, bomba siempre activa.
No lava con agua caliente.
Agua no se calienta adecuadamente.
No vacía el agua correctamente.
No vacía el agua.
No saca agua del tambor, suena al tratar de sacar el agua.
Se pierde agua en algunos lavados.
La bomba de agua pierde agua por el eje.
La bomba de agua está activada constantemente y funcionando.
No entra agua a la lavadora, no inicia el ciclo de lavado.
La ropa no se lava correctamente quedan manchas y sale húmeda.
Carga agua estando apagada.
Carga poca agua y muy lentamente.
Coge agua solo en algunos programas.
Pérdidas ocasionales de agua.
Se va quedando sin agua durante el lavado.

PROBLEMAS CON EL DETERGENTE

La gaveta del jabón no se vacía de detergente.
No se realiza el centrifugado en ocasiones y no carga suavizante.
Cajetín del detergente.
El jabón se queda en la gaveta del detergente.
Sale espuma por la gaveta del detergente.

AVERIAS DE LA ESCOTILLA (PUERTA DE LA LAVADORA)

Después de lavar no se puede abrir la puerta.
El soporte metálico de la puerta está roto.
La goma de la escotilla está negra y con moho.
Salta el diferencial y no se abre la escotilla.

La lavadora o lavarropas es un aparato eléctrico y mecánico, dentro del grupo de los electrodomésticos, de uso doméstico o industrial, que se usa para el lavado de ropa. Empezó a comercializarse por los años 20 en EE.UU., pero no es hasta los años 40 ó 50 cuando se convierte en un artículo de masas. En Europa se populariza durante los años 60 llegando a ser un aparato imprescindible en los hogares. Actualmente, ha pasado de ser un electrodoméstico netamente funcional, a tener un claro diseño estético y elegante por sus acabados y líneas integrables o panelables con el mobiliario de la cocina.

Hay dos tipos de modelos en el mercado: las lavadoras de carga frontal, que tienen la escotilla de carga en la parte delantera del aparato y la ropa sube y cae según el tambor gira; y las lavadoras de carga superior, que disponen de la escotilla de carga en la parte de arriba y una puerta de acceso al tambor, que está dispuesto de la misma forma que las de carga frontal.

El tambor es un cilindro con orificios por donde entra el agua mezclada con detergente y gira lentamente para que la fricción de la ropa sucia al moverse haga que se vaya limpiando. También permiten estos agujeros drenar el agua, una vez terminado el programa de lavado, mediante centrifugación. Estos tambores son movidos por un motor eléctrico que está situado detrás y bajo el tambor y que transmite la tracción mediante correas. Hay lavadoras con motores de transmisión directa (Direct drive) sin correas y por ello son muy silenciosas y producen muy poca vibración.

La escotilla tiene un sistema de bloqueo que evita poder abrirla mientras está en funcionamiento la lavadora, y que se desbloquea en cuanto ha terminado el lavado. Este sensor es un semiconductor llamado Termistor que varía su resistencia eléctrica en función a la temperatura y activa un bimetal que deja conducir la corriente o no, según si está en funcionamiento el aparato o en reposo.

Gracias a la microelectrónica, hay modelos híbridos que integran la función de lavadora y la de secadora en un mismo aparato, ahorrando así en espacio y en tiempo de colada: son las lavasecadoras o lavadoras-secadoras. Y muchos modelos tienen software que controla tiempos, velocidades y temperaturas según las necesidades cambiantes de la carga, e incluso algoritmos de recolocación de ropa que evita las vibraciones que se van produciendo durante el centrifugado.