Elegir un sistema de sonido para tu salón
Escoger un sistema de sonido puede ser tan importante como contar con un buen televisor o proyector en nuestro salón. Si te gusta disfrutar de las películas o series como si estuvieras en el cine, o simplemente quieres escuchar música con un sonido envolvente y en la mejor calidad, te daremos algunas nociones para ayudarte a elegir un sistema de sonido adecuado a tus necesidades.
Qué tener en cuenta antes de elegir
Instalación: Lo primero que debemos tener en cuenta es el espacio en el que instalaremos el sistema de sonido. Hay que decidir si prefieres una instalación con cables o inalámbrica. Para la primera opción, el cableado deberá ir escondido o grapado por las paredes (por encima del rodapié y el marco de la puerta si fuera necesario). Es la opción más compleja pero necesaria si eliges un sistema de home cinema convencional, aunque ya hay algunos modelos con altavoces inalámbricos. La opción inalámbrica es la más cómoda pero nos limita a elegir entre unos pocos modelos de home cinema o decantarse por otras opciones como las barras de sonido o los auriculares sin cables.
Qué uso le daremos: otro punto a tener en cuenta será el propósito del sistema de sonido. Si queremos un equipo para simplemente escuchar música, podemos barajar opciones más económicas que los home cinema.
Número de canales: la numeración de dos dígitos separados por punto se refiere al número de canales con los que cuenta el sistema de sonido. El primer dígito es el número de altavoces y el segundo indica si tiene subwoofer o no. Por ejemplo, los sistemas de sonido más extendidos para ver películas son los 2.1 y los 5.1. Como indica su numeración, el 2.1 cuenta con dos altavoces y un subwoofer, mientras que el 5.1 cuenta con 5 altavoces y el subwoofer.
Tipos de sistemas
Home Cinema
Es el más extendido ya que permite disfrutar de una experiencia completa en cuanto a sonido de alta calidad. El home cinema o cine en casa, es un sistema que busca reproducir en tu hogar la experiencia de estar en un cine.
Un sistema de sonido home cinema está compuesto por receptor/amplificador, varios altavoces y subwoofer. El número de altavoces, como hemos indicado anteriormente, vendrá determinado por la numeración. Los más habituales son los 5.1, compuestos por dos altavoces frontales, dos traseros y uno central, además del subwoofer.
Debemos fijarnos en varios puntos a tener en cuenta al elegir home cinema:
- Potencia del amplificador: cuanto más grande sea la sala dónde queremos instalar el home cinema, más watios deberá tener el amplificador del equipo para obtener una mejor calidad de sonido.
- Decodificadores: dentro del sonido existen ciertos estándares o formatos de audio para dar textura y calidad al sonido reproducido. Es por esto que nuestro home cinema debe contar con codificadores para poder reproducir los principales formatos del mercado, como pueden ser Dolby, DTS, THX.
- Conectividad: las conexiones de cada sistema dependen de los fabricantes, pero la mayoría suelen ofrecer unos estándares como son las entradas analógicas, entradas digitales (ópticas o coaxiales), Jack, RCA, S/PDIF y XLR. Existen modelos inalámbricos que funcionan a través de infrarrojos o Bluetooth.
Barras de Sonido
Este sistema de sonido es el ideal si queremos una opción más económica, no disponemos de mucho espacio en la sala o simplemente buscamos una instalación más sencilla que la del home cinema. También es una gran opción para los que buscan un sistema para escuchar música.
Consta de dos elementos, la propia barra de sonido y un subwoofer, que puede ser inalámbrico. Al tener los altavoces integrados en un solo aparato, el efecto de sonido envolvente es más difícil de conseguir, por lo que es una peor opción si la comparamos con el home cinema, pero que puede ser igualmente satisfactoria ya que ofrece un sonido de calidad superior al que pueden reproducir los altavoces de un televisor.
Auriculares HI-FI
La solución ideal para quien busque comodidad y discreción, ya que es la más sencilla de utilizar y no molestarás a los de tu alrededor a la hora de ver películas o escuchar música al volumen que quieras. Además, la calidad de audio que consiguen es excelente ya que pueden ser de 5.1 y hasta 7.1.
Principalmente existen dos tipos:
- Inalámbricos: funcionan con baterías y son más cómodos al no estar sujetos por cables, pero con una calidad de audio que se puede ver afectada por interferencias según te alejes del receptor.
- Con cable: ofrecen una experiencia de sonido más fiable y sin interferencias. Como desventaja está la movilidad, por tanto debemos asegurarnos de que la longitud del cable es suficiente para cubrir la distancia que tenemos hasta el sofá.